lunes, 17 de noviembre de 2008

Juegos de preescolar con Mike Skinner

Lo mío no es el hip hop, pero me encantó el concierto de The Streets en Madrid. Los ví en Barcelona hace unos años, y no tuvo nada de nada que ver. Allí parecieron desorientados y medio pedos. Pero el sábado dieron un gran concierto en la Joy Slava en lo que fue la primera vez que tocaban en Madrid. La actuación fue claramente de menos a más y nos lo pasamos como enanos. Empezaré con la única cosa mala: el sonido fue regular. Pero si lo demás mola uno se acostumbra y se la pela bastante y si la actuación va a más el sonido malo se nota menos y parece que incluso mejora. Aunque en canciones como Everything is borrowed o It´s too late fue bastante malo y en Has it come to this (aunque Mike Skinner ya empezaba a divertirse), también. Eso fue, como digo, lo único malo.

Lo bueno, muchas y variadas cosas. La mejor, algo muy inusual en un concierto: la gran comunicación entre artista y público. No recuerdo algo igual de divertido en un concierto de este calibre. La Joy (nunca había estado) es un teatro estilo Koko en Londres pero bastante más pequeño, y Mike Skinner se dedicó a señalar con el dedo (que en otras circunstancias es de mala educación y en estas es de buena) a quien le hacía gracia del público, y les decía cosas. Repartía cervezas, pedía porros, y la gente encantada. Al principo, más en general, se dedicó a pedirle a la gente que se despertase y a provocar haciendo gestos de irse a la cama, aunque yo creo que en realidad esto se lo decía a sí mismo, porque el papel de un tío como el Skinner, pretendiendo que todo el mundo se lo pase teta, tiene su mérito y requiere de un buen esfuerzo.

Despues ya en caliente se dedicó a vacilar con algunas chicas en plan ligoteo y con algunos chicos a los que parecía conocer y se animó a hacer juegos de preescolar pidiendo al público que se agachase (esto fue genial) en un momento determinado, que contasen al revés, que diesen cuatro saltos en medio de una canción, que se quedasen quietos (en plan congelados) en medio de otra o que diesen cuatro gritazos en el estribillo de Has it come to this. Al final terminó metiéndose entre el público para alcanzar a un tío tocho que había justo al final de la pista, haciendo el animal, saltando sin parar, presentando con algarabía a su banda y agradeciendo que hubiésemos comprado la entrada para ir a verle. Gran actitud la de este chaval que nos contagió a todos.

Otra de las cosas que me sorprendió muy gratamente fue que tocara con una banda en directo en la que sólo estaban pregrabados los arreglos de viento y cuerda, algunos samplers y para de contar. Batería, bajo, guitarras, teclados, y los dos raperos (el negrito se lo estaba pasando bomba y cada estribillo se lo cantaba a alguien del público con una enorme sonrisa). La escenografía también fue muy bonita con el fondo cambiando a cada canción.

Y el repertorio, pues fue un grandes éxitos. No eché de menos casi ninguna, hit tras hit, las conocía todas (o casi), y aunque es difícil cantar en un concierto así salí sin voz, sudado y muy contento. El bis fue espectacular con Turn the page, Heaven for the weather y Fit but you know it. Antes habían caído Weak become heroes, Could well be in, Dry your eyes, Too much brandy, Let´s push things forward, Blinded by the lights, Has it come to this o It´s too late, o sea, que para entusiasmo general se centró en sus dos primeros discos.

Cheers Mike!

miércoles, 12 de noviembre de 2008

Escupir al cielo y mi legado hippie (odio a los hippies) o Las mejores cosas de la vida son gratis

Por primera vez (y espero que última) este mi blog se va a disfrazar de aquella lamentable serie de entre los 80-90 en la cual un tontocoño escribía por las noches en su computadora de la época las lecciones que le enseñaba la vida (sic). ¿Cómo se llamaba la serie?. A ver si alguien se acuerda y me lo recuerda.

Cosas del dinero. Si algo he aprendido en las últimas horas (sic) es que uno no puede ir por la vida de romántico, de desprendido, de hippie (odio a los hippies). Ser bueno es escupir al cielo. Al final, cuando alguien no sea igual que tú y te duela, harás un bonito reproche y aquello te caerá en la cara. Y no quiero decir que lo contrario de ser bueno sea ser malo. Lo contrario de ser bueno es ser realista, vivir en un mundo donde lo que importa es el saco donde metemos nuestros enseres y nuestros billetes. Lo demás es muy bucólico pero acabarás con la cara llena de salivazos. Y no es que yo sea siempre bueno, ni mucho menos. A veces (quiero pensar que pocas) soy un cabrón y otras, que es peor, un gilipollas.

O sea, que cuando uno se siente incomprendido por algo pero no hay tu tía a hacer entender tu punto de vista y de repente te cae una mierda del cielo, lo mejor es asumir la culpa. Aunque sea injusta a todas luces. Como dicen sabiamente los de Astrud, en cosas de dos es siempre más fácil cargar con la culpa.




Y estoy refiriéndome a la pasta. "Con lo que tú me debes voy a hacerme rico", cantaban Los Planetas, que son los maestros en reproches.

En este vídeo también de Los Planetas dejo mi legado hippie y mi frase lapidaria (espro que del lustro). Alegrías del Incendio no es ni de lejos su mejor canción (se me ocurren 20 mejores de aquí a China) pero el vídeo me emociona. Aunque el mensaje es muy bonito a lo mejor a mi hermana pequeña, que aún va al cole, el vídeo le parecerá un tanto "graciosillo".

NO, CLARA, NO ES UN VIDEO X NI NADA QUE SE LE PAREZCA (bueno un poco sí que se le parece). DALE AL PLAY
He aquí mi legado hippie y mi frase lapidaria:
"Las mejores cosas de este mundo son gratis".
(Eso sí, como me jodas el ipod ya me estás comprando otro, claro. Cada uno mete en su saco lo que le da la gana).

miércoles, 5 de noviembre de 2008

Off To Alaska

I might be broke but I'm not fist busted


Última hora: El lado oscuro nos advierte sobre la letra pequeña en las eleciones de ayer en yankilandia: se ha prohibido el matrimonio gay en California (con los demócratas arrasando), Arizona y Florida. Algo que celebrar para la Palin. Y ya empezamos con los bluffs.


Segunda actualización: definición de la DEPRESIÓN:


domingo, 2 de noviembre de 2008

Adoración, La Ola, Happy Together

Y el último día ví tres películas:

Una buena, Adoración, que cuenta los orígenes de Enjuto Mojamuto, sus vínculos con el mundo árabe y cómo un día que estaba offline meeting real people -porque internet no funcionaba-, quemó una mini SD con un vídeo en el que su abuelo le prometía que internet nunca dejaría de funcionar.

Otra buena pero menos, La Ola, que va de los chicos de 90210 que, cansados de enrollarse y divertirse, se compran camisas blancas y vaqueros y se visten así para acabar con el qué me pongo hoy, y al final Steve Sanders se vuelve loco, se pone a hablar en alemán y se pega un tiro porque Donna traiciona el pacto y se pone un top de color rojo..

Y la úlima, la lamentable Happy Together, -buen ejemplo de cómo invertir en vergüenza ajena-, cuenta la estupenda historia de unos ricachones tontocoños que hablan en flamenco y que mamonean sin sentido hasta acabar todos muertos.

Y la ganadora, según Juanjo Puigcorbé y otros entendidos, fue Estómago, homenaje a Pretty Woman que demuestra que el canibalismo es buena opción para hacer amigos si eres un tío gracioso. La segunda, Espiga de Plata, fue el telefilme argentino El Frasco, que es en realidad una espléndida película sobre cómo los calvos follamos fatal pero conducimos de puta madre.

El año que viene, más diversión.